Antes de empezar a trabajar con Sara, estaba emocionalmente muy mal. Estaba perdida… ¡y no me arrepiento de haber empezado este proceso! Gracias a cada sesión, he ido conociéndome y aprendiendo a gestionar mis miedos para atreverme a enfrentar esos problemas que antes no era capaz de gestionar. Ahora ya sé cuál es mi siguiente paso laboral y me siento en paz. Sobre todo, Sara me ha ayudado a pensar más en mí y a observarme sin juzgarme ni machacarme. Me he encontrado, he empezado a gestionar mejor mis emociones y, lo más importante, he detectado todo el potencial que tengo y que puedo aportar a la gente de mi entorno. Sara es una gran Coach Transemocional. Transmite mucha energía y es una gran experta en su campo. Dulce y muy dedicada a su trabajo. ¡Me has ayudado muchísimo! ¡Gracias Sara!

Antes de comenzar el proceso con Sara, me sentía muy confundida, con la mente saturada y atrapada en pensamientos en bucle que me bloqueaban. Todo me parecía más grande de lo que era, y eso me generaba ansiedad e inseguridad. Ahora siento más claridad que nunca, me siento serena y cuento con herramientas reales para gestionar mis emociones. He aprendido a observar mis pensamientos con más distancia y a enfocarme en lo que sí depende de mí. Me siento más confiada y conectada con lo que necesito. Decidí apostar por mí, dejar de postergar un cambio que llevaba tiempo necesitando. Redefiní mis prioridades, solté compromisos que ya no me representaban y abrí espacio para un nuevo proyecto personal con mucho más sentido. Gracias por todo Sara.

Antes de empezar este proceso, me sentía abrumada, apática y con mucha autoexigencia. Me costaba pasar a la acción y caía fácilmente en la procrastinación. Ahora me siento feliz. He conseguido mi objetivo, me valoro mucho más, me quiero y me respeto. He aprendido a poner límites sin culpa y a priorizarme. Sara, solo puedo darte las gracias por acompañarme en un momento tan importante de cambio. Me ayudaste a crecer y mejorar como persona, y eso es algo que siempre llevaré conmigo. Tengo una suerte inmensa de haberte conocido. Gracias por acompañarme en un momento difícil de cambio y ayudarme a mejorar como persona.

Me sentía triste, bloqueada emocionalmente, apagada y abatida. Estaba completamente desconectada de mí misma. Ahora siento que he recuperado mi esencia, la alegría, la ilusión por trabajar y las ganas de dar lo mejor de mí. Me siento guiada, con herramientas para equilibrar mi estado emocional y con una nueva perspectiva sobre lo que antes me afectaba. Siento que he sanado heridas importantes. Sara ha sido una luz en las tinieblas y con ella he conseguido encauzar mi profesión para poder salir del entorno que me dolía. Ha sido mi guía y mi inspiración. Es una gran profesional que transmite alegría, calma y serenidad. Está siempre a tu lado para orientarte y ayudarte. Gracias a ella y el proceso de Coaching Transemocional veo las cosas que me afectaban desde otra perspectiva. Siento que he sanado ciertas heridas. Me siento orientada y guiada para ir consiguiendo lo que me he propuesto. Agradezco enormemente su labor, gracias de todo corazón.

Antes de empezar el proceso, me sentía perdida y no me quería. Hoy me siento como una persona nueva, llena de alegría, con mucho más amor propio y un conocimiento profundo de quién soy. Estoy profundamente agradecida por haber contado con tu ayuda. Nunca imaginé que alguien daría tan en el clavo para ayudarme a salir del bache más duro de mi vida. Después de probar con varios profesionales, fue contigo con quien volví a ver la luz. El proceso de Coaching Transemocional contigo me cambió la vida, ayudándome a dejar de pensar en el futuro de una manera angustiosa y entender que la chispa de la vida es la vida misma. Gracias, Sara, por devolverme la esperanza. Eres una gran profesional.

Tenía la sensación de que no estaba avanzando, me sentía estancada, bloqueada en el ámbito profesional de mi vida. Sabía que necesitaba un cambio, pero que no tenía claro por dónde empezar, ni tampoco veía qué posibilidades tenía realmente. Después de realizar el proceso de Coaching Transemocional con Sara, me siento plena y con la confianza de tomar la decisión de dar un giro a mi vida personal y profesional. Estoy ilusionada y muy feliz de haber tomado la decisión libre y valiente de emprender con mi propia empresa. Gracias por tu ayuda y por ayudarme a tomar acción, por tus herramientas y por tu podcast “Reflejos de vida”. Gracias por hacer que, dentro de mi cabeza, florezcan nuevas ideas y rumbos, por abrirme opciones que ni yo misma había puesto encima de la mesa y que, finalmente, me han permitido desbloquear mi sentimiento de estancamiento. Gracias a este proceso me he permitido escucharme, entenderme y decidir tomar un camino de libertad profesional. De verdad, te lo agradezco muchísimo. Ha sido un placer encontrarnos.

Antes de empezar este proceso, me sentía con muchas dudas sobre mí misma y sobre mi capacidad para emprender, para trabajar por mi cuenta y para ayudar a los demás. Estaba frustrada, porque tenía muchas ideas y formación, pero poca confianza. Después del proceso me siento ilusionada, con una mentalidad de crecimiento y con la certeza de que sí puedo. El problema no era yo, sino que no sabía por dónde empezar, cómo hacerlo ni qué priorizar. He aprendido a abrazar mi nueva identidad como Coach, comunicar mi transición laboral sin tantos miedos o prejuicios hacia lo que los demás puedan pensar. He dado el paso de invertir en crear mi propio negocio de Coaching para lograr que sea mi fuente de ingresos económicos y emocionales. Sara me ayudó a sentirme más alineada con quien soy yo y, por tanto, más en calma y con el control de la situación. Ha sido un proceso muy bonito, me he sentido muy acompañada, escuchada y comprendida.

Sentía que mi vida iba en piloto automático, sin establecer prioridades ni un rumbo claro. Ahora siento que soy una versión mejorada de mí misma. Estoy empezando una nueva etapa que me ilusiona profundamente, y esto ha sido gracias a las sesiones y al Coaching Transemocional trabajado con Sara. Me siento más segura de lo que hago, con claridad sobre lo que quiero y la dirección que deseo tomar. Pero, sobre todo, ahora sé qué necesito priorizar y cómo enfocar mi vida, algo que me hace mucha ilusión. Lejos de darme miedo, este cambio me motiva, me ilusiona y me llena de ganas de construir la vida que empecé a diseñar contigo. Gracias de todo corazón, Sara.

Me sentía perdida, triste, desubicada, sin saber tomar decisiones. No gestionaba bien mis emociones, ni me conocía a mí misma. Me sentía a contracorriente del resto de las personas, desubicada, con muchos miedos. No sabía cómo autogestionar ni validar mis emociones de forma saludable. Ahora, después del proceso de Coaching Transemocional con Sara me siento fuerte, valiente y empoderada. Soy capaz de tomar decisiones, accionar con seguridad y llevarlas a cabo. Me siento decidida, segura de mí misma y conectada con lo que realmente quiero. He aprendido a escucharme a mí, y no tanto a los demás. Estoy decidida a dedicar tiempo a mis hobbies, valorar cambios laborales y llevarlos a cabo. Estoy tomando acción. Ha sido un proceso esclarecedor y muy enriquecedor. Destaco lo acompañada y comprendida que me he sentido por Sara durante todo el proceso. Gracias por tu ayuda, ¡eres la mejor!

Cuando empecé el proceso, me sentía perdida, con miedo constante, sin reconocer ni sentir mis emociones. No entendía la importancia de quererme y ni siquiera sabía por qué comenzaba este camino. Pero desde la primera sesión, descubrí que lo primero era trabajar mi confianza, mi amor propio, cómo me hablaba... y soltar mi autoexigencia y perfeccionismo. Hoy me siento orgullosa de la Johanna que soy. La que se pregunta cada mañana: “¿cómo estás, Johanna?”, la que sabe identificar lo que siente, la que ha aprendido a ponerse límites y la que está aprendiendo a ponérselos también a los demás. Pero, sobre todo, la que se quiere con todas sus fuerzas. Me siento fuerte, segura y, sobre todo, creo en mí. Eso es lo que has conseguido, Sarita: que crea en mí. Este proceso ha sido un acompañamiento precioso. Hemos crecido juntas y cierro esta etapa con una enorme gratitud. Me quiero, me respeto y por fin me priorizo. Gracias, de corazón, por tanto cariño y por hacer tu trabajo con tanta ilusión. Eres maravillosa.

Me sentía totalmente bloqueada e insegura. Sabía que necesitaba un cambio, pero no me veía capaz de llevarlo a cabo. Me faltaba claridad, me sentía culpable constantemente y no entendía qué me pasaba ni cómo actuar. Tenía muchas ganas de empezar porque al leerte en Haz de Luz (tu newsletter), sentí que conectábamos y que podrías ayudarme. Ahora me siento segura de mí misma y de mis decisiones, porque sé que están alineadas con lo que de verdad es importante para mí. He descubierto mis valores, mi eje, y he aprendido a hacerme responsable de mi vida sin sentirme culpable por ello. He conseguido la claridad que tanto necesitaba, y eso no tiene precio. Eres una persona maravillosa y doy gracias a la vida por haber dado contigo. Gracias por acompañarme en este proceso, por tus enseñanzas. Gracias Sara, ¡eres increíble!